El salmón ahumado es una de las cosas mas ricas que pueden existir, y es verdad, es una de las más caras también, pero por suerte para nosotros ya es posible hacerlo en tu casa y disfrutarlo inmediatamente.
Algunos detractores van a decir que esto no es ahumado real, y por supuesto, esto no lo es, pero los invito a que lean la etiqueta del salmón «artesanal» que compraron la última vez y se van a sorprender. La verdad está ahí. Humo líquido.
Entonces, ¿por qué no replicar lo mismo en casa? Para preparar el salmón vas a necesitar salmón fresco, que en la zona podes conseguir en las pescaderías que tenemos que son muy buenas, sal, azúcar y humo líquido, que lo compras en los locales de herboristería y dieteticas o incluso en algunos supermercados.
La cantidad de sal y azúcar depende de la cantidad de salmón que quieras preparar, para 500 grs de salmón necesitas 250 grs de azucar y 250 grs de sal, esta proporción de azúcar y sal debe manterse en 50/50 igualando el peso del salmón. Limpias la partes grasas que pueda tener el salmón y colocas en un recipiente hermético la mitad de la mezcla de azúcar y sal a modo de colchón, colocas el salmón y encima el resto de la mezcla. Para darle el toque ahumado colocas unas gotas de humo liquido sobre la pieza, no mucho para que no quede muy fuerte, cerras el recipiente y a la heladera.
Una hora después podes ver que el salmón ya habrá comenzado a perder el liquido, lo cual es el objetivo del marinado, y a las dos horas ya habrá absorbido sal y azúcar suficiente como para que esté sabroso y puedas utilizarlo en ensaladas, brusquetas o lo que se te ocurra. Ahora, si la pieza que preparaste es muy grande, es conveniente dejarlo de 24 a 48 horas en el marinado, lo cual va a permitir que pierda mayor cantidad de líquido y puedas conservarlo más tiempo en la heladera. Cuanto más tiempo lo dejás, más seca se vuelve la carne también. Para conservarlo luego de marinado, es conveniente cortarlo en laminas, colocarlos en un frasco y cubrirlos en aceite.
El salmón de la foto estuvo solo dos horas marinandose, y el color y sabor que adquiere es fabuloso. Para preparar las brusquetas cortas unas rodajas en diagonal de pan tipo baguette, las colocas en una plancha para tostar o en una fuente al horno, las doras un poco rociandolas con aceite de oliva y un poco de albahaca, las retiras, untas con queso crema, colocás una lámina de salmón ahumado y finalizas con un poco de ciboulette picado. Increíble. De nada.